Tecnología y Matemáticas

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miércoles, 6 de abril de 2011

Nube con radiación

Nube con radiación podría dar la vuelta al mundo en dos o tres semanas 
AFP 26.Marzo.11.- De acuerdo con la Comisión Preparatoria del Tratado de Prohibición Completa de Ensayos Nucleares (CTBTO) la radiación liberada por la central nuclear de Fukushima, como consecuencia del terremoto y posterior tsunami que hace dos semanas sacudió el noreste de Japón, podría dar la vuelta al mundo en dos o tres semanas y durante la semana se reporto que ya habían llegado partículas radiactivas a Islandia. Siguiendo este patrón, fuentes de la CTBTO indicaron que la contaminación llegará a los países europeos en los próximos días. En un margen de entre dos y tres semanas habrá recorrido gran parte del planeta. La CTBTO cuenta con 63 puestos de observación en todo el mundo. Las partículas radiactivas se desplazan por tierra, aire, e inclusive son llevadas por personas y equipajes. El milisievert (mSv) es la unidad de medida estándar internacional de exposición a la radiación. Una pequeña dosis de radiación provoca irritaciones en la piel. Una exposición a niveles extremadamente altos puede ocasionar cáncer y la muerte. Hasta 250 mSv es completamente normal y no tiene efectos apreciables. A partir de 500 mSv puede haber síntomas como vómitos, mareos, cansancio y a partir de 4 Sv, la probabilidad de morir es de un 50% en 30 días. Una radiografía de tórax implica alrededor de 0.2 milisieverts de radiación, una persona promedio se expone a unos seis milisieverts de radiación al año, aproximadamente la mitad de los cuales proviene de fuentes naturales y la otra mitad de procedimientos médicos. Por su parte, la OMS señaló que se debe evitar la automedicación con yoduro de potasio, utilizado como supuesto profiláctico contra las radiaciones porque puede traer consecuencias negativas para la salud a menos de que estén aconsejadas por las autoridades sanitarias de cada país.

martes, 5 de abril de 2011

Contaminación Radioactiva

Radiación en aguas cercanas a planta nuclear supera 5.000 veces el límite legal





Prensa YVKE Mundial/ TeleSur
MARTES, 5 DE ABR DE 2011. 6:53 AM
El nivel de yodo radiactivo en las aguas marinas cercanas a la central nuclear japones de Fukushima, en el noreste del país asiático, supera en cinco mil veces el límite legal permitido, según el más reciente informe emitido por la empresa Tokio Electric Power (Tepco), operadora de la averiada planta. 
Tepco informó que el nivel de cesio-137 en las mismas aguas exceden en 1,1 millón de veces el límite legal.
 
Una muestra recogida a tempranas horas del pasado lunes en un área marina, próxima al reactor 2 de Fukushima, reveló una concentración de yodo-131 de 200 mil bécquerels por cada centímetro cúbico.
 
Mientras el yodo-131 tiene una vida media relativamente breve, de ocho días, el periodo de semidesintegración del cesio-137 es de 30 años.
 
Dos días antes, el sábado, la concentración de yodo-131 era aún mayor, de 300 mil bécquerels por cada centímetro cúbico, equivalente a 7,5 millones de veces el límite legal, según la corporación Tepco.
 
Los técnicos que trabajan en la central nuclear de Fukushima tratan de determinar las vías por las que llega al mar el agua radiactiva, que se cree puede provenir del núcleo del reactor 2.
 
Varias zonas de las unidades 1, 2 y 3 de Fukushima están inundadas con agua muy contaminada, que dificulta seriamente los esfuerzos de los operarios para tratar de enfriar los reactores atómicos, dañados por el terremoto y devastador tsunami del 11 de marzo.
 
El pasado lunes Tepco comenzó una operación para verter al mar 11 mil 500 toneladas de agua con una radiactividad relativamente baja (cien veces superior al límite) proveniente de depósitos y del sótano de las unidades 5 y 6.
 
El objetivo es hacer espacio en esos lugares para almacenar ahí parte del agua mucho más radiactiva (hasta 100 mil veces el límite legal) que anega parte de las unidades 1 a 3. 
Por su parte, el ministro japonés de Agricultura y Pesca, Michihiko Kano, aseguró este martes que se estrecharán los controles sobre los productos marinos de la zona de Fukushima y las provincias colindantes ante la continua filtración de agua radiactiva al mar.
 

“Las inspecciones se reforzarán en la región de Ibaraki y también en la costa cercana a la ciudad de Choshi, en la provincia de Chiba y al este de Tokio”, dijo el ministro.

Japón lanzó al mar más de 11 millones de litros de agua radiactiva
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Yvke Mundial /Telesur
LUNES, 4 DE ABR DE 2011. 1:34 PM
Ingenieros japoneses arrojaron al océano Pacífico al menos 11 mil 500 toneladas (a una densidad de 1kg/l) de agua radiactiva de la planta nuclear de Fushima (noreste), para “facilitar las tareas” de sus operarios que intentan encontrar la fuente de las filtraciones en esta central afectada por el terremoto y posterior tsunami del 11 de marzo. 

La empresa operadora de la planta nuclear japonesa de Fukushima, Tokyo Electric Power (Tepco) señaló que la operación que comenzó a las 19H00 locales (10H00 GMT), implicará arrojar en las próximas horas al Océano Pacífico 11 mil 500 toneladas de agua procedente de depósitos especiales y del sótano de los reactores 5 y 6, las únicas de las seis unidades de la central que están por ahora controladas.
 

“No tenemos más opción que verter esa agua contaminada en el océano como medida de seguridad”, reconoció el portavoz de Gobierno, Yukio Edano.
 

El líquido excede cien veces el límite legal de yodo-131, un nivel relativamente bajo en comparación con el del agua que inunda algunas áreas de la planta nuclear, con una radiación hasta 100 mil veces superior, dijo Tepco.
 

El objetivo de Tokyo Electric Power es dejar espacio en los depósitos para almacenar el agua altamente radiactiva que inunda los edificios de turbinas de los reactores 1, 2 y 3, y que “dificulta seriamente las labores de los operarios para enfriar esas unidades”.
 

La Agencia para la Seguridad Nuclear de Japón indicó que la operación no entraña riesgos para la salud.
 

Por otro lado, los ingenieros japoneses tienen previsto construir una cortina gigante de sedimentos en el océano para impedir que la contaminación se expanda desde la planta de Fukushima.
 

Los ingenieros aún tratan de recuperar el control de los reactores dañados en la planta, en la peor crisis nuclear desde la de Chernóbil en 1986.
 

El Gobierno nipón ha instado a Tepco a actuar con más rapidez para frenar la expansión de la radiación.
 

El secretario jefe de gabinete, Yukio Edano, dijo que podría llevar meses controlar las fugas “e incluso más recuperar el control de la planta”.
 

"Tenemos que frenar la expansión (del agua contaminada) al océano tan pronto como sea posible. Con esa fuerte determinación, estamos pidiendo a Tokyo Electric Power que actúe con rapidez y debe vigilar su posible impacto medioambiental.", dijo Edano.
 

La situación en la central nuclear de Fukushima permanece muy inestable. Se ha corroborado la existencia de una grieta de 20 centímetros en el segundo reactor, con la consiguiente fuga de radiactividad al mar.
 

Según el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), 21 de los trabajadores que permanecen en Fukushima sufren alteraciones genéticas a causa de la radiación. Todos ellos deberán seguir reconocimientos intensivos para estudiar su evolución ante el aumento de la probabilidad de sufrir cáncer.
 

Por otro lado, dos trabajadores de Tepco desaparecidos desde el 11 de marzo en la central de Fukushima, fueron encontrados sin vida en el sótano de una de las unidades de la planta nuclear.
 

Las víctimas de 21 y 24 años de edad trabajaban en el área de mantenimiento del edificio de turbinas del reactor 4, de la menciona planta nuclear, donde les sorprendió el fuerte terremoto y posterior tsunami.
 

Los cadáveres fueron hallados el pasado miércoles al drenar el agua contaminada que inundaba el sótano, por lo que antes de hacer la autopsia tuvieron que ser limpiados de radiactividad.
 
Las pruebas determinaron que ambos fallecieron el mismo día 11 hacia las 16H00 local (07.00 GMT) a causa de hemorragias externas.








Aunque todavía no se llega a niveles de desastre, los problemas en la planta nuclear de Fukushima en Japón han puesto en alerta al mundo ante la posibilidad de un escape de radiación que pueda afectar la salud de las personas. ¿Cuáles son exactamente estos riesgos? ¿Por qué hay tanto temor?


Radiación


Los átomos pueden volverse radiactivos cuando están inestables. Elementos como el uranio, que se usan comúnmente en las plantas nucleares, no tienen una forma estable en la naturaleza y son siempre radiactivos. En este estado, los núcleos de los átomos pasan por un proceso de desintegración, durante el cual se libera mucha energía. Esta energía incluye rayos gamma, neutrones, electrones y partículas alfa y beta que son disparadas a través del espacio.

Dependiendo de la dosis de radiación que reciba la persona, el efecto puede ir desde daños leves a la piel, vómitos, caer en coma y hasta la muerte. La radiación daña el ADN de las células, pudiendo tener efectos como mutaciones o generar cáncer. Algunos de estos daños pueden ser recuperados, mientras que otras veces no.

La radiación no afecta a todas las personas de la misma forma, y el efecto está determinado por la dosis, el tiempo de exposición y la distancia a la fuente de la radiación.


¿Qué material es el que está saliendo de la planta de Fukushima, y qué efectos tienen?


Distintos combustibles nucleares pueden producir diferentes elementos radiactivos, con diferentes efectos tóxicos. Por el momento se cree que gases como el xenón y kriptón se estarían liberando, junto con isotopos de yodo 131, cesio, estroncio, telurio y rubidio.

El xenón y kriptón no son absorbidos por el cuerpo, de modo que tienen poco efecto sobre la salud. Sin embargo, el yodo y el cesio sí son más dañinos.

La tiroides humana absorbe yodo para crear hormonas. Si la glándula comienza a absorber yodo 131, que emite rayos beta, puede dañar el ADN causando cáncer de la tiroides. Después del desastre de Chernobyl en Ucrania en 1986, más de 6.000 personas desarrollaron cáncer a la tiroides, probablemente por beber leche contaminada cuando niños. Por alguna razón desconocida, el yodo 131 no parece afectar a los adultos.

Las autoridades japonesas repartieron pastillas de yodo para los niños ante esta emergencia. La idea es saturar a la tiroides de este elemento de modo que ésta no absorba el yodo radioactivo.

Por otro lado tenemos al cesio 137, que es mucho más difícil de erradicar que el yodo. Los niveles ambientales de este elemento todavía son altos en Europa después de Chernobyl. En algunos lugares de Inglaterra está prohibido comer ovejas, mientras que en otras partes no se pueden comer los hongos. La exposición al cesio no ha sido relacionada directamente con un problema de salud en específico, aunque puede provocar náuseas, vómitos, hemorragias y daños celulares dependiendo de la concentración y tiempo de exposición.



El estroncio, en tanto, es absorbido por el cuerpo como si fuera calcio, y se deposita en los huesos por años, irradiando al organismo desde adentro, causando cáncer u otros problemas de salud.

Otros isotopos pueden demorar miles de años en desaparecer del medioambiente, contaminando en ese tiempo la tierra, a los animales y las plantas, lo que es uno de los peores efectos de estos accidentes.

Los que están más en riesgo en este momento son los trabajadores de la planta de Fukushima, que están muy cerca de la fuente de radiación y que podrían ser gravemente afectados por ésta. El resto de la población ha sido evacuada a distancias seguras.


¿Cómo se mide la radiación?


La radiactividad se mide en términos de cuántos átomos se desintegran espontáneamente cada segundo. Se han desarrollado distintos instrumentos para detectar distintos tipos de radiación.

Cuando se habla de exposición de personas a la radiación, la unidad de medida que se utiliza son los sieverts, que miden el efecto biológico en el cuerpo.

Los humanos siempre hemos estado expuestos a la radiactividad del ambiente, ya sea por fuentes naturales o artificiales. Como promedio, una persona recibe entre 2,4 y 10 milisieverts al año por rayos cósmicos, el sol y otros. Una persona que trabaja con material radiactivo recibe en promedio 50 milisieverts de radiación. Una radiografía de rayos X impacta con 0,02 milisieverts, mientras que una tomografía agrega 8 milisieverts. Ninguno de esos examenes dura mucho tiempo – con una exposición más prolongada podría resultar más peligroso.

También, aunque altas dosis de radiación pueden causar cáncer, en la terapia contra el cáncer se usa radiación en altas dosis, aunque focalizada en los tumores y durante poco tiempo.

Todavía es muy pronto para saber cuál será el efecto de la liberación de radiación de Fukushima, ya que no están todavía demasiado claros los niveles que hay en la atmósfera y no sabemos aún cuál será el desenlace de la crisis por la que está pasando la planta.




Acerca del Autor

Cony Sturm • (Santiago, Chile) 
Editora de FayerWayer / Reportera / Escritora de posts / Fotógrafa / Telefonista / e-mail ninja / "Community Manager" /@conysturm en Twitter